Me duele ser mujer en Argentina, porque amanezco día a día con una nueva mujer maltratada, una nueva mujer golpeada, una nueva mujer violada, una nueva mujer secuestrada, una nueva mujer asesinada.
Me duele ser mujer en Argentina, porque cada 29 horas asesinan a una mujer, por el simple hecho de ser mujer.
Me duele ser mujer en Argentina, porque nos asesinan y nos encuentran en un arroyo, como a Melina Romero. En una bolsa de basura, como a Ángeles Rawson. En un descampado, como a Micaela García o Daiana Garcia. O nos llevan a centros de salud diciendo: “está drogada”, cuando en realidad nos violaron y empalaron como a Lucía Pérez.
Me duele ser mujer en Argentina porque todos los días nuestros secuestradores, nuestros violadores y nuestros femicidas quedan en total libertad. Mientras nosotras nos quedamos sin vida.
Me duele ser mujer en Argentina, porque día a día las mujeres nos quedamos con nuestros sueños a mitad de camino, con mucho talento sin poder demostrar, con mucho cariño sin poder dar. Simplemente, nos roban cada ilusión que teníamos dentro de nuestros corazones.
Me duele ser mujer en Argentina porque todos los días, desde que tengo uso de razón, tengo miedo de que mi mamá, mi abuela, mis amigas, mis primas, mi compañeras de trabajo o colegio no vuelvan. También me asusta la idea de ser yo quien un día no vuelva a su casa.
Pero si eso pasa, como no pude ser la única, quiero y deseo ser la última.
Por Micaela Garcea Tonin – Coordinadora de Accionar Joven
