Aislamiento social obligatorio XL

Sábado a la noche, previo al fin de semana extra largo por el feriado del 25 de mayo, ¿y?…

Todo va a seguir como hasta entonces, da lo mismo sea feriado patrio, puente o no laboral, los días ya no son lo que eran, no se huele un lunes o sábado, todo sabe mas o menos igual. Busco en “youtube” una urgente y enérgica clase de TAE BO FIT, una disciplina del gym que te enseña a dar golpes de puños y patadas, una clase “ATR” donde descargas pegando piñas al aire, como un boxeo virtual, qué me importa si solo le pego a micro partículas del aire, en una de esas le emboco a la COVID 19 y me gano el premio del año, lo importante es descargar, imaginarte el EMOJI de la persona que no te aguantas y sacar la energía contenida, la impotencia, las ganas y las desganas, el cansancio, la angustia oral, la ansiedad, el encierro.

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El profe extranjero de TAE BO dice que voy bien y aunque sea un vídeo grabado le creo y también dice que falta poco y sin embargo veo que restan 45 minutos, ¿pero saben que? le creo, elijo creerle. ¿Y con el aislamiento social obligatorio podría hacer lo mismo?

La sensación es como si ya hubiese vivido miles de VIDAS PASADAS ¿podré pagar mi karma con salidas de 1 hora en el fin de semana y a 500mts a la redonda? Ya me angustié, lloré, me reí, hice gimnasia con bidones de agua y libros, recomendé series, pasé el portal 444 y unas cuantas lunas llenas, me junté para “cuarentenear”, no nos aguantamos y me separé; reemplacé la frase “no estoy en casa” por “perdón, tengo un zoom”; limpié cada producto del supermercado con un trapo con lavandina, dejé de limpiar; cosí barbijos, compré barbijos porque no supe coser bien; saqué permiso para circular, descubrí porque el lavarropas tiene dos compartimientos para el jabón y en cual va el suavizante; vi por primera vez en 5 años la habitación de mi vecino de al lado y corroboré su buen gusto, deje de tener que decir “BUEN DIA” diariamente al encargado del edificio, básicamente deje de vivir de las puertas de la calle Mariano Acha hacia afuera.

Ahora toda mi vida es interna, de este lado del vidrio, estamos divididos en outdoor e indoor, de un lado y del otro como cuando jugábamos al “QUEMADO”. Te tiro un whatsapp si te “toca” respondes, sino te queda acumulado como tantos otros; de pronto tiro un VIVO DE INSTAGRAM, pasa de largo no consigo mas que 3 seguidores se sumen en lo interesantísimo que tengo para ofrecer; me tiran un “zoom de cumpleaños familiar”, quemado, el mismo bodrio que en vivo pero sin poder escuchar a nadie y con un montón de tías que deben creer que la cámara está en el teclado y se enfocan la peluca.

La paradoja del deseo ¿no?, porque eso que siempre dijimos “que ganas de quedarme en casa” ahora se transformó en rutina, entonces queremos hacer lo otro, lo diferente ahora me dan ganas de ir a trabajar, de tomar un bondi, de usar la SUBE, de hacer la fila de los domingos para cargar nafta con descuento, de ir al pago fácil, de jugar al froggle para cruzar en tiempo record la avenida 9 de julio.

Cuanto más “XL” se hace este aislamiento social obligatorio mas “S” es nuestro sentido del humor: donde se fueron los memes de Los “Simpsons” y  gatitos, los Dj en los balcones, los livings de los personal trainners, el baile del “kulikitakaka” ahora todos a invernar, a guardarnos como osos y a “Unirse a la reunión:

“Zoom”https://cuarentena82dias.amba.xl/Cvid/19202122home=emboleyanosabemosquehacer2020fuera

ID de reunión: 200520

Contraseña: GO to sleep

Por Martin Piñol – Productor – Actor

Capítulos anteriores:
EXPERIENCIA: Aislamiento Social Obligatorio

EXPERIENCIA Aislamiento Social obligatorio “3” (o la NETFLIXILIBIZACION de nuestra vida cotidiana)