Las unidades se levantarán en los municipios de Merlo, Tigre, Moreno, Quilmes y La Matanza. Preocupación vecinal.
El Senado bonaerense aprobó ayer el proyecto por el cual la Provincia construirá dos unidades penitenciarias y diez alcaidías en el Conurbano. Para llevar adelante esta acción, el Ejecutivo bonaerense expropiará una serie de terrenos ubicados en Quilmes, Merlo, Tigre, La Matanza y Moreno.
La iniciativa, que fue presentada en su momento por el ministro de Justicia y Derechos Humanos provincial, Julio Alak, y que ya contaba con media sanción de la Cámara baja, busca descomprimir la situación actual que viven los reclusos. En la actualidad hay más de 52 mil presos para la mitad de las plazas penitenciarias.
“Sería prudente que todos puedan acceder a lo mencionado por e l ministro en su presentación. Dio una cabal demostración y explicación de este plan integral, que considero es histórico y reparador para la situación del Servicio Penitenciario Bonaerense. Construir establecimientos y alcaidías va a permitir garantizar derechos y otorgar condiciones dignas a quienes están privados de la libertad”, dijo el senador del Frente de Todos, Gustavo Soos, a cargo de la Comisión de Obras y Servicios Públicos.
Pese a que la oposición presentó argumentos en contra de algunos espacios elegidos para expropiar y comenzar la construcción de unidades penitenciarias, eligió acompañar con el peso de la mayoría en la Cámara alta. En concreto, pidieron que los espacios sean consensuados con los intendentes locales. No sería un problema: los cinco distritos escogidos son gobernados por el Frente de Todos.
Los municipios establecidos no responden a una elección arbitraria. Según explicó el propio Alak, la decisión de que las cárceles se concentren en el Gran Buenos Aires, en un corredor entre la avenida General Paz y Ruta 6, responde a que cerca del 70% de los detenidos son residentes del Conurbano.
La intención es reforzar el vínculo del detenido con su familia a través de la cercanía y descomprimir la situación de las comisarías y los efectivos policiales que hoy se encuentran al cuidado de calabozos.
Por parte de la oposición, Roberto Costa, presidente del bloque Juntos por el Cambio, expresó el acompañamiento de su fuerza política. “La Matanza tiene 4 mil detenidos y solo tiene lugar para 400. Es decir que hay 3.600 matanceros que están en otros lados, que generan visitas largas, prolongadas y a las que no pueden acceder personas de bajos recursos”, sostuvo.
Como era de esperar, la iniciativa generó el rechazo de algunos de los vecinos de las zonas por considerar que la presencia del establecimiento penitenciario generará un problema de inseguridad para el área donde se instalen y desvalorizará sus propiedades.
En algunos municipios, vecinos protestaron a través de las redes sociales ante el anuncio de la iniciativa y de la propuesta de expropiación. En Quilmes, por ejemplo, se armó un grupo virtual llamado “No a la construcción de la cárcel en la Ribera”. Hubo una movilización por las calles para expresar el malestar. Sin embargo, desde el Municipio dejaron en claro que los terrenos a expropiar “están a más de 20 cuadras de La Ribera”, en la zona de Solís y Panizza. El resto de los terrenos a expropiar están en Merlo (sobre la Ruta 1001), Tigre (en Dique Lujan, al límite con Escobar), Moreno (en El Vergel, Cuartel V) y en La Matanza.
“Estamos encontrando el camino de los consensos para acordar políticas de Estado y se está dando en esta temática. Destaco el acompañamiento porque estamos dando el puntapié para llevar adelante una política que viene a sanear años de deficiencia”, agregó Soos.
La Provincia está sancionada a nivel internacional porque no cumple con los estándares mínimos que establecen las organizaciones para el alojamiento en las cárceles. El gobernador Axel Kicillof asumió en diciembre pasado en el marco de la huelga más grande que se haya llevado a cabo en la Provincia.
