El intendente de Tigre y candidato a senador provincial por Somos Buenos Aires, Julio Zamora, apuntó con dureza contra el gobernador Axel Kicillof por su visita a Benavídez para apoyar a candidatos de Fuerza Patria. “De la noche a la mañana apareció el gobernador en Tigre”, ironizó, y lo acusó de priorizar actos partidarios en lugar de resolver deudas históricas con el distrito y la Provincia.
El jefe comunal enumeró reclamos en áreas sensibles: “Pensé que había ido a ver el arroyo Lola, que hace años requiere saneamiento; pensé que iba a venir al hospital provincial de Pacheco, que se incendió hace cinco años y no hicieron ninguna obra; pensé que iba a hablarle a los vecinos de las islas y decirles cuándo iba a dragar los ríos del delta”.
Zamora también señaló deficiencias en el sistema de salud: “Una vecina de 48 años con pie diabético lleva diez días esperando una operación de amputación y no tiene turno en ningún hospital. En la Provincia para una operación de vesícula hay que esperar tres años”.
En materia de seguridad, fue igual de crítico: “Pensé que nos iba a restituir los diez patrulleros que nos sacaron en este último año, o los más de 150 agentes de la Policía que nos quitaron a los vecinos de Tigre”.
Para Zamora, la presencia del gobernador no tuvo que ver con las necesidades locales: “Vino a un acto político a decir que el peronismo debía estar unido y a apoyar a los candidatos del peronismo. Teléfono, Gobernador: son todos candidatos del Frente Renovador, sin historia en el peronismo”.
Con tono desafiante, el intendente cerró: “Constituimos este gran espacio que es Somos Buenos Aires, con peronistas, radicales, vecinalistas y compañeros de otras extracciones políticas. Es el punto de partida para gobernar la Provincia y hacer una Argentina mejor”.