En el marco del 75° aniversario de esta tradicional celebración, el intendente Julio Zamora destacó la importancia de la unidad y el trabajo colectivo. Cientos de vecinos participaron de la procesión, la misa y la emblemática caravana náutica en honor a la Virgen María.
El Municipio de Tigre conmemoró el 75° aniversario del Día de la Virgen con una jornada que incluyó una procesión a pie, una misa presidida por Monseñor Guillermo Caride y la tradicional Procesión Náutica. Durante el acto central, el intendente Julio Zamora expresó: “Estamos convencidos de que trabajando junto a los vecinos de Tigre vamos a construir una comunidad mejor para todos”.
La celebración comenzó en la Parroquia Inmaculada Concepción, desde donde cientos de fieles acompañaron la figura de la Virgen María hasta la intersección de las calles Lavalle y Paseo Victorica. Allí se llevó adelante la Santa Misa, a cargo del obispo coadjutor Guillermo Caride y con la participación de autoridades eclesiásticas y municipales.
Más tarde, se realizó la Procesión Náutica en el río Luján, encabezada por una embarcación de la Prefectura Naval Argentina que trasladó a la Virgen, acompañada por el intendente Zamora, su esposa Gisela Zamora y el obispo Caride. “Este evento es una oportunidad para reflexionar y trabajar por una sociedad de paz, escuchando las necesidades de quienes más lo necesitan”, agregó el jefe comunal.
La jornada contó con presentaciones del Ballet Municipal de Folclore y Tango, el grupo La Guardia Salamanquera y Almas Gemelas. Además, se desplegó un operativo de seguridad coordinado por el Centro de Operaciones Tigre (COT), con la participación de Defensa Civil, Tránsito y el Sistema de Emergencias Tigre (SET).
Silvina, vecina del barrio Las Tunas, destacó: “Venimos desde que somos chicas y me parece que es un evento muy importante para vivir en familia”. Mientras tanto, María, de Don Torcuato, invitó a participar: “A alguien que nunca vino le diría que no se lo pierda, estuvo todo hermoso”.
Desde 1949, la Procesión Náutica es un emblema de esta celebración, que en los últimos años ha crecido en relevancia gracias al trabajo conjunto del Municipio y la comunidad católica.