El conflicto de los policias bonaerenses manifestandose en la Quinta de Olivos habria sido el detonante de la ruptura dentro de la cupula de SOMOS.
Aparentemento Victoria Donda quedaria con SOMOS y podria recalar en La Campora mientras que Daniel Menedez de Barrios de Pie se integraría al Movimiento Evita,
Desde el dia de ayer anda circulando por grupos de WhattApp de militantes el siguiente escrito:
🇦🇷La oportunidad de ser mejores❤️
Es hora de reforzar el proyecto colectivo. Es hora de poner el contenido por sobre las formas. Es hora de construir de verdad una organización popular, feminista, nacional y democratica.
Hace dos años un grupo de compañerxs de todo el país nos embarcamos en la aventura de construir una nueva organización política y social. Todxs veníamos de otra experiencia política que nos había causado frustraciones. Hay decepciones que en la vida rompen algo para siempre. Generan una reacción. Es porque algo nuevo está naciendo dentro de nosotrxs.
Así, a mediados de 2018, de pronto irrumpió en nosotrxs una necesidad profunda de discutir un nuevo rumbo político para la organización. Entendimos que era impostergable la derrota del macrismo como proyecto político y cultural en la Argentina de entonces y que sólo la instalación nuevamente de un gobierno popular devolvería los sueños y las esperanzas a millones. Pero para poder ser parte del músculo político que le pusiera un final a Macri en las urnas, antes nosotrxs debíamos zurcir una nueva organización, que estuviese alejada de los vicios y errores de la etapa anterior.
Con creatividad, decisión, humildad y coraje logramos volver a ponernos de pie. Ya sin las anclas que nos impedían caminar. Fuimos protagonistas de la derrota del macrismo y hoy somos parte del gobierno de Alberto y Cristina. Ayer como hoy nuestra mirada es la misma: ser artífices de nuestra propia historia. Otrxs eligen mirarla pasar desde lejos o cuidando solo la pequeña cuota de poder que tienen.
Ya con el Frente de Todxs en el gobierno empezamos a ver en nuestra organización, al igual que en el eterno retorno, que volvían a asomar y tomar forma los vicios que creíamos desterrados y abandonados en nuestra etapa anterior: el autoritarismo, el machismo en la conducción, los procesos de toma de decisiones viciados y mentirosos, y el uso abusivo y extorsivo de los recursos, entre otros. Lo viejo volvía a aparecer aunque ahora encarnado de otra forma.
En las últimas semanas, la soberbia alcanzó su máximo nivel y el personalismo terminó triunfando en ese gran campo de batalla que todxs tenemos: el corazón. Cuando la arrogancia anida allí ya no hay vuelta. Y ahí empezó lo más triste de todo este proceso: toma de decisiones sin consultar a gran parte de lxs dirigentes de la organización, armado de grupos paralelos (el caso de Córdoba es elocuente), desconocimiento de la conducción y el trabajo de los compañerxs, clausura de debates utilizando tácticas mentirosas, castigo mediante quita de recursos a compañerxs que expresaron disidencias con respecto a muchas cosas.
La gota que colmó el vaso se dió la semana pasada cuando en medio de un conflicto tan sensible como particular, como fue el alzamiento policial, el Presidente de la Nación se comunicó con la que hoy es la principal referencia de nuestra organización, Victoria Donda, para pedirle que no movilicemos a la Quinta de Olivos. Algunos compañerxs, la mayoría de ellxs además varones, desoyeron ese pedido y se movilizaron igual.
Es inevitable preguntarse cual habría sido la historia si ese llamado en vez de hacerse a Victoria se hubiese hecho a otro compañero varón que hasta esta semana formaba parte de nuestra dirección. ¿Se habrían movilizado igual?. Todxs sabemos cuál es la respuesta: no. Lo que prueba sin lugar a dudas el profundo machismo que ha anidado en la metodología de algunos integrantes de la organización.
No hay que confundirse: la actual crisis por la que pasa nuestra organización fue creada por aquellxs que intentaron concentrar todo el poder y las decisiones desconociendo a todxs lxs demás. Tal y como se hacía en la organización que dejamos anteriormente.
Ese grupo de compañerxs ha construido un ambiente sumamente tóxico y violento en la organización. Tan solo en las últimas horas, han llamado e intentado apretar a decenas de integrantes de Somos/Barrios de Pie de todo el país. Se hace cada vez más difícil recuperar con ellos confianza política para poder superar la situación en la que estamos. Ya no se trata de que ellxs tengan que recapacitar o deshacer sus acciones; si no que deberían cambiar por completo la forma en la que construyen y hacen política.
Sin embargo, creemos que esta crisis también abre una inmensa oportunidad: la de reformular nuestra organización y prepararla para un nuevo periodo de crecimiento y protagonismo político. Pero algo más importante aún. Este proceso interno nos regala la oportunidad de ser mejores.
Mejores dirigentes, mejores compañerxs, mejores militantes. Mejores personas. Porque si quienes militamos en política no lo hacemos por la felicidad de nuestro pueblo mejor corrernos a tiempo y dedicar la vida a otra cosa.
La reformulación que hoy nos encontramos atravesando tiene que hacerse rescatando nuestras mejores tradiciones políticas y recordando el principal motivo por el que formamos Somos Barrios de Pie: podíamos ser mejores. Todavía podemos ser mejores.
Pero para serlo tenemos que dejar en claro cuáles son los principios innegociables con los que tenemos que trabajar:
👉El machismo, la misoginia y la violencia política tienen que ser desterrados para siempre de la organización, especialmente de sus ámbitos de conducción. Muchos compañeros tendrán que aceptar que les toca hacer política en un nuevo tiempo, en el cual las voces de las compañeras tienen el mismo peso y la misma autoridad que las de ellos. También les tocará aceptar que la nuestra es una organización que es dirigida por mujeres en muchos ámbitos y espacios.
👉Los recursos y las decisiones sobre los mismos ya no estarán más concentrados en una sola persona. Los mismos deberán ser administrados de forma transparente y en colectivo, con una mirada federal. Todas las provincias que conforman la organización deben tener voz y voto en el manejo de los mismos. Si queremos construir un país más federal, debemos empezar a construirlo puertas adentro.
👉La toma de decisiones deberá ser democrática y transparente. No se disfrazarán nunca más caprichos individuales como decisiones colectivas. Tenemos que empezar a trabajar cuanto antes en un diseño institucional de nuestra organización que permita el disenso y la solución de diferencias sin correr a nadie y sin acallar ninguna voz. El centralismo democrático como forma de organización se agotó y no vamos a volver a él.
En los últimos días algunos compañerxs dijeron que aquellxs que escribimos esta nota somos un grupo cerrado y minoritario, guiado solo por aspiraciones personales. Nada más alejado de la realidad. Son ellxs lxs que están en minoría, ya que nuestras críticas y puntos de vista representan a la gran mayoría de lxs compañerxs de todo el país. Así quedó expresado en los últimos ámbitos realizados en capital y provincia y a nivel nacional.
Somos la mayoría de los compañeros y compañeras las que queremos construir una organización más colectiva, más federal, feminista, con la convicción de que podemos ser protagonistas de una transformación profunda y popular en nuestro país. Ese es el sueño al que venimos a invitarles. Entre todas, todos y todes construir el instrumento político y social que sea protagonista de un mejor país. Ese país con el que soñamos y que jamás dejaremos de hacerlo.
Porque el día que dejemos de soñar habremos perdido para siempre.
