El nuevo espacio verde cuenta con 2.000 m² de áreas recreativas, mobiliario urbano, juegos y un mural colorido, recuperado para el disfrute de los vecinos de la zona.
En una entrevista realizada durante la recorrida oficial de la nueva Plaza Olazábal, Clara Sanguinetti, secretaria de Espacio Público de San Isidro, destacó la importancia de este espacio para los vecinos de Boulogne: “Es el primer espacio verde que inauguramos en esta gestión y representa un logro significativo para la comunidad”, afirmó.
Ubicada en la manzana de Olazabal y Asamblea, entre Uriarte y Sáenz, la plaza, que hasta hace poco estaba en estado de abandono, “tenía focos de obras inconclusas, pero nuestro equipo definió el proyecto y completó el espacio, agregando juegos, mobiliario y áreas verdes”, continuó Sanguinetti.
Entre las mejoras, se instalaron nuevos juegos infantiles, áreas para relajarse y tomar mate, además de 17 árboles y canteros con plantas nativas. Uno de los atractivos más especiales es la inclusión de la planta Asclepia, que “atrae mariposas monarca, permitiendo a los niños observar todo el proceso desde la oruga hasta la mariposa”, agregó la funcionaria.
La plaza, que se inaugurará oficialmente próximamente, también incluirá cámaras de seguridad y se está evaluando la incorporación de un placero para garantizar el cuidado del lugar. “La seguridad pasiva es clave, y con la gran iluminación y el flujo de vecinos, buscamos que todos nos cuidemos entre nosotros”, explicó Sanguinetti.
Además, el espacio será ideal para eventos culturales al aire libre, con un amplio sector central preparado para actividades artísticas y ferias, que refuerza la intención de generar más interacción entre los vecinos. “Esta plaza tiene un concepto artístico identitario, y esperamos aplicar este criterio en futuras intervenciones en espacios públicos de San Isidro”, concluyó.
