La Fundación Impulso y Encuentro cumplió su primer año de trabajo formal en San Fernando, y lo celebró con la inauguración de su sede en Alvear 2608 (esquina Sarratea), la reentronización de San Cayetano en esa esquina histórica del barrio y un encuentro comunitario con vecinos, vecinas, niños y adolescentes.
La directora de la Fundación, Romina Selzer, encabezó la jornada junto al padre Gonzalo Rebollo, de la parroquia Santa Teresita de Virreyes, quien bendijo la nueva sede y las imágenes instaladas, entre ellas una cerámica con el rostro del Papa Francisco donada por los Misioneros de Francisco.
Durante el encuentro se compartió un guiso comunitario y se restituyó la figura de San Cayetano, el santo del pan y del trabajo, que históricamente estuvo presente en esa esquina del barrio.
“Inaugurar no es solo comenzar, sino también ratificar el rumbo que iniciamos hace un año. La Fundación es una construcción colectiva que crece cada día junto a la comunidad de San Fernando y los siete barrios que rodean nuestra sede”, expresó Selzer. “Volver a entronizar al santo del pan y el trabajo, que históricamente ha acompañado al barrio desde esta esquina, es un orgullo y un acto de revalorización de la historia de nuestra ciudad y del sentimiento colectivo de los vecinos y vecinas”.
Si bien la fundación fue creada en 2019, formalizó su funcionamiento institucional en 2024, y desde entonces promueve iniciativas vinculadas a la integración social, la inclusión y la economía solidaria. Su objetivo es tejer redes comunitarias para enfrentar los desafíos de los sectores más vulnerables de la sociedad.
Entre sus principales propuestas se encuentran la campaña Alimentos Justos, que ofrece productos básicos a precios accesibles mediante una red de comercialización solidaria, y la campaña Construir Milagros, lanzada para ayudar a reconstruir la casa de la familia de Carolina Ramos, fallecida en un incendio.
La sede también cuenta con La Ludoteca, un espacio para el desarrollo de las infancias; Casas de Atención y Acompañamiento Comunitario, que abordan consumos problemáticos; y la Consejería Micaela García, centrada en problemáticas de género. Además, el Centro Cultural La Esquina funciona como un espacio de acceso al arte y la cultura para los barrios del entorno.