En coincidencia con el 31 de octubre, Día de la Reforma, las iglesias evangélicas del distrito nucleadas en la Fraternidad de Pastores de San Fernando realizaron un acto religioso y musical en el que oraron y pidieron la bendición divina para autoridades y vecinos.
La concejal Corina Ramírez, quien estuvo presente junto a su colega Carlos Bergandi, expresó: “Este es un evento que se hace desde hace mucho, que el Municipio y la gestión del Intendente Luis Andreotti, y el Concejo Deliberante declaró De Interés Legislativo y Municipal. Lo realizan las iglesias de la Fraternidad de San Fernando, unidas, preparando esta conmemoración del Día de la Reforma, además de haber instalado en San Fernando el Día de la Oración”.
“Por eso, cada año acompañamos a la Fraternidad y a los pastores que hacen mucho por San Fernando. Son un tejido social muy importante, una herramienta fundamental para poder trabajar en los barrios. Acompañamos este día con mucha alegría, sabiendo que cada día las iglesias aportan un poco más a nuestra ciudad para ser mejores”, concluyó Ramírez.
Marcelo Fernández, Pastor del Centro Cristiano “Vida Eterna”, agregó: “Este momento es especial, donde podemos gozar como sanfernandinos rogando a Dios que siga bendiciendo nuestra ciudad. Es necesario que podamos unirnos en estos tiempos en un solo corazón sin banderas, para que Dios bendiga a cada autoridad, al pueblo a cada barrio para que siga creciendo, así como hoy”:
Y Carlos Aguilera, Pastor de la iglesia del Movimiento Cristiano “El Misionero”, dijo: “Celebramos el Día de la Reforma, y el Día de la Iglesia Evangélica. Como todos los 31 de octubre, nos juntamos a orar por la ciudad, y aprovechando este evento, convocamos a todas las iglesias”.
“En San Fernando tenemos alrededor de 110 iglesias, y a la fraternidad de Pastores Evangélicos están asociadas 40. Agradecemos a las autoridades y que Dios los bendiga a todos”, concluyó Aguilera.
Respecto a los asistentes, Rodrigo, vecino de Virreyes, dijo: “Es muy lindo, porque se bendice a San Fernando y se les trae el Señor a muchas personas, que quizá se acercaron sin conocer a Cristo, que es el Dios verdadero que restaura la vida de cada uno”.
Y Jerry, vecino de Santa Catalina, finalizó: “Es una oración de tantos años de la iglesia, que el Municipio apoya. Y es una gran bendición para nosotros. Verlo no se puede explicar con palabras humanas. Creemos en el poder de Dios que obró y estamos muy agradecidos, por eso venimos todos los 31 a darle gracias”.