¿Qué vez cuando Tevez?

“En las cosas del amor, aunque tengo mucho que aprender, nadie sabe más que yo”.  Homero Expósito- Héctor Stamponi. 1963

 “Espejito, espejito”” Dime espejo una cosa, ¿quién es ahora en este reino la más hermosa?” Hermanos Grimm. 1812

brickel

¿Que Macri te vez cuando te ves? El capitán de Boca y amigo de Mauricio Macri (62 años), Carlos Tevez (37 años), presentó este jueves un amparo ante la Justicia para no pagar el aporte solidario a las Grandes Fortunas.

 El futbolista con largo pasado en Argentina, Reino Unido, Italia y China, argumentó que el Impuesto “es confiscatorio”. Piensa que es excesivo.

La acción de Carlos Tevez fue en simultáneo con la de otros empresarios. Más de 80 fueron las presentaciones que se registraron, en lo Contencioso Administrativo Federal, durante los días previos al vencimiento de la obligación de pagar el Aporte Solidario y Extraordinario.

Algunos ciudadanos le exigen a Tevez que respete su origen social y económico y sea solidario. Se olvidan que él sabe, de dónde viene y de donde quiere irse, lo hace como puede. No ha ido al colegio Cardenal Newman, pero aprende rápido, aunque, quizás, no todo. Es tomado y toma perspectivas de su “entorno actual. ¡Y si! Tevez también tiene “entorno”

Su sensibilidad es tributaria de Fuerte Apache y de otras fuertes experiencias.

La fama y el honor hacen recorridos disimiles. El honor va surgiendo de la integridad, la decencia, sensibilidad, trabajo, y racionalidad para transitar la vida.

Requiere un fuerte (¡otra vez “Fuerte”!) respeto a los demás hombres. ​ Así el honor es fruto de la dignidad, entendido como deseo a respetar y ser respetado por los demás. El honor, problematiza el famoso dicho: “hazte la fama y échate a dormir”.

Pertenece al que cumple las leyes de la sociedad en la cual se vive. Y surge del cumplimiento de los propios deberes, en relación a la República donde habitamos.

Respeto viene del latín respectus, palabra compuesta por re- y spectrum: “aparición”, “mirar”, “volver a mirar”, no quedarse con la primera mirada que hacemos sobre algo, revisar la idea inicial de una cuestión y volver a mirarlo. Es reconocimiento mutuo.

Ahí está Maradona, a los 60 años, el 1 de septiembre pasado, público una foto suya de joven, en Villa Fiorito, apoyando al llamado “impuesto a la riqueza”. Dice: “en este momento de crisis, se necesita de la ayuda de los que más tenemos. Se lo que es no poder despedir un ser querido. Yo sé lo que es no tener para comer por eso estoy a su disposición. ¡Vamos Argentina!”.  Muchos años antes, Diego, le había hecho la gambeta a Macri como a los ingleses.

Fue, es, una simple acción honrada que se orienta en la equidad; al cumplimiento de los propios deberes respecto del prójimo y de sí mismo. Esto no es fácil en épocas ordinarias, y menos en épocas extraordinarias ¿excesivas?

Acto de dignidad, es lo de Maradona. Es el gesto de un individuo, que, en esta circunstancia de excepción, sintió respeto por sí mismo al respetar y valorar a los otros. Puso en pie de igualdad, la posibilidad que todos puedan gozar de lo que dice el Preámbulo de la Nación Argentina.

Para Macri, hace mal pie, cuando imperativamente dice: “que se mueran los que tienen que morirse” y eso lo diferencia en mucho de Tevez el de Fuerte Apache y del Maradona el de Villa Fiorito.

(*El origen del apellido Homero Expósito, se debe a que su padre era huérfano, y decidió adoptar ese apellido, como forma de no olvidar su origen de niño expósito.)

Por Ricardo Arias – José Manuel Grima – Otoño 2021 – Agrupación Sudeste