Podría ser obligatorio el uso de “tapabocas” en la Provincia de Buenos Aires

El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, reconoció hoy que evalúa el “uso obligatorio de tapabocas, no de barbijos” para combatir al coronavirus en la provincia, pero remarcó que es una medida que hay que definir con la Nación, ya que no se trata de “cortarse solo”.

“No puede haber soluciones porteñas a problemas bonaerenses”, puntualizó Kicillof cuando se le pidió una definición sobre el uso del tapabocas, después de que el jefe de gobierno de Ciudad de Buenos aires, Horacio Rodríguez Larreta, impusiera su obligatoriedad desde el miércoles 15 de abril.

brickel

“Evaluamos el uso de tapabocas pero no vamos a tomar medidas sin consultarlo con la Nación. No es cuestión de cortarse solo. Mañana vamos a escuchar a los expertos. No gana el que toma la medida más rápida sino que ganamos todos juntos”, expresó Kicillof en rueda de prensa tras recorrer la planta de la empresa Dánica en la localidad de Lavallol.

Aclaró que su gobierno evalúa el uso obligatorio de “los tapaboca y tapa nariz doméstica, sobre todo para el que está infectado sin saberlo” pero descartó la obligatoriedad de barbijos, al afirmar que “quiero prohibir el uso de barbijos médicos para la población y reservarlo paras el sector salud”.

Cuando se le señaló que en la Ciudad de Buenos Aires se dispuso la obligatoriedad de tapabocas a partir del 15 de abril, Kicillof aclaró: “no quiero polemizar con nadie, pero por una cuestión de orden hay que ponerse de acuerdo con la línea que baje Nación, porque si cada jurisdicción hace lo que quiere la gente se confunde”.

“No puede haber soluciones porteñas para problemas bonaerense”, agregó el gobernador e insistió que “por una cuestión de orden acordaremos todo con el Gobierno nacional”.

Esta mañana, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, confirmó que la provincia de Buenos Aires analiza la posibilidad de disponer la obligatoriedad del uso de tapabocas para evitar la propagación del coronavirus.

“Se le ha puesto tapaboca porque, en realidad, se debe tapar los dos lugares por los que se accede a las vías respiratorias”, explicó.

Gollán expresó que, con la llegada del frío, se ingresa en una época en la que habrá “un 20, 25 o 30% de las personas que empiezan a estornudar o a toser”, y como “una gota puede llegar a siete metros” se torna necesario “agregar barreras”.