NI UNA MENOS se impulsó para visibilizar la lucha de miles de mujeres que padecen violencia.
Todas podemos ser una menos. La problemática trasciende las clases sociales, religiones, edad…
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Partidizarlo es banalizar el problema es volver a humillar y violentar a aquellas que con su cuerpo y su alma lucharon por decir basta, nos siga matando, no nos sigan callando.
“Ni una menos”es más que una consigna, un grito desesperado, una voz que no puede acallar, es un golpe que hace tambalear lo más profundo de nuestra cultura
Que “ni una menos”sea un grito de libertad y esperanza.
Que no exista ni una menos, significa que habremos ganado la batalla.
Por Silvia Flores – Cooperativa LA JUANITA
