El aire en Parque Alvear es irrespirable. A los vecinos se les cierra la garganta, tosen sin parar, la piel se les seca y el agua que consumen está contaminada. No siempre fue así… Hace algunos años este era un barrio tranquilo, con árboles alrededor, la vereda pertenecía a cada uno de ellos. La realidad cambió con la cementera categoría tres que se instaló allí.
Cansados de la forma en que viven, presentaron tres denuncias ante la fiscalía de Malvinas Argentinas para frenar el avance de la cementera que contamina el aire, el agua y afecta su salud. No tuvieron respuesta.
La semana pasada la televisión nacional se hizo presente para viralizar la situación de los malvinenses, pero el grito desesperado de ayuda no se escuchó en el Municipio. Por eso, Lucas Aparicio convocó a Florencia Arietto para sumar esfuerzos y convicciones en busca de una respuesta formal por parte de la intendencia actual.
“El municipio hace campaña diciendo que se están plantando más de de 4000 árboles y talaron 29 mil metros cuadrados de árboles de 100 años”, cuenta un vecino que vive hace 70 años en el lugar y que rememora que ya estaban allí cuando él era chico, y que ahora sólo viven en su recuerdo.
Hoy, los vecinos del barrio Parque Alvear junto a Aparicio y Arietto se acercaron al Municipio para conocer si la empresa Cavalsa se encuentra habilitada para llevar adelante este despliegue, pero para la voz de los vecinos la puerta grande se encontró cerrada.
“Como venimos nos vamos, no nos recibieron”, declaró Lucas Aparicio y agregó que van a presentarse como querellantes ante la fiscalía para ver cómo sigue el expediente y llamó a alzar la voz por todos los vecinos de Tortuguitas.
Por su parte, Arietto resaltó: “sólo queríamos saber el número de expediente y la habilitación de la empresa porque no puede estar diluyendo ni cemento ni brea ni todo lo que está haciendo ahí adentro. No hay un estudio de impacto ambiental”.