Habiendo aprendido el oficio junto a su padre, a quien denominó como “un gran carpintero”, Hector Crestanello relató a NorteOnline al respecto de su maestro: “Mi papá hacia cualquier cosa, por eso nosotros le deciamos el picadero. Él hacia la quilla a su gusto y ahí armaba el bote, en perfectas condiciones, todo de cabeza, sin plano, sin nada. Así aprendí, y yo también los hago todo de cabeza, los colores, todo me lo voy imaginando y desde ahí los voy haciendo”.
Continuó su relato comentando que en el año 2003 su hija le pidió que le construya un bote que pudiera llevar para vender a la feria, impulsándolo, tiempo después, a comenzar a venderlos él mismo. Desde entonces es posible hallar a Hector y a sus botes de madera a escala todos los fines de semana sobre la Avenida Liniers y Viamonte.
Tras el pedido de un amigo, quien estaba interesado en realizarle un regalo al entonces Intendente Sergio Massa, Hector le construyó una lancha de pasajeros. “A Sergio le encantó y me lo agradeció, y desde ahí empezó el Municipio a regalar mis lanchas a las personalidades que lo visitan. Hoy Julio Zamora, continua con esta costumbre”, expresó con orgullo Hector.
Este carpintero de oficio y pasión calcula que al día de hoy debe de haber vendido más de 4000 de sus artesanías, entre botes y lanchas, habiendo sido enviadas muchas de ellas al extranjero. “Mis lanchas están en todos casi todos los países. Se las han llevado a la Embajada de China, otras han ido a Italia, Francia, Alemania, Inglaterra, Brasil. Es un orgullo que estas lanchas, que representan a la isla y a Tigre estén en todos lados”, concluyó este reconocido artesano tigrense a NorteOnline.
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