La cultura no se declara, se hace.
Y casi siempre en un paisaje de barbarie.
Juan Jose Saer. 1999
La Dra Veneno, hecha de carne corruptible y fantasías infames, decidió vomitar su retortijón omnipotente de sangre y fuego haciendo el 22 de diciembre 2020, una, otra, denuncia de envenenamiento a diestra y siniestra. Ahora contra el presidente de la Nación Argentina y el ministro de Salud. Así, en el vértigo exhibicionista, creyo confirmar su narcisismo en la masa de fanáticos que la siguen.
Las participaciones extorsivas de la Dra Veneno, puestas en la línea del tiempo, la descubren con denuncias sin ton ni son, alentando eventos corruptos desde su puro capricho gastronómico. Se auto exhibe como objeto estandarte de la culminación del lujo pequeñoburgués conservador y, enclavada en ese sitio, se autoriza a cualquier extravagancia a costa de los propios y el sufrimiento de los habitantes del país. La Dra Veneno, espectral, hace crepitar su sombra dejando una estela de mentiras y extorsiones. Pretende privilegios para su imagen libertaria dando letra a los represores transformados en tilingos o” funcionarios de la Administracion” macrista. Todos juntos buscan, desde donde sea, inculcar respeto a la propiedad privada, a las herencias, a ganancias corruptas y a los dividendos de las sociedades anónimas. Y en la pandemia intenta de la destrucción de los equipos de salud y de los trabajadores esenciales, e impedir la vuelta al trabajo y a las escuelas.
Para ella los ricos son propietarios indiscutibles de la riqueza, y fantasea que han sido ricos siempre y poseen anticuerpos a destajo. Sostiene que Cambiemos es un Macri, el que hace un tiempo fue una tipo inmoral y ahora el ex presidente es el líder de la honestidad universal. La Dra, aquí sigue a Cambiemos y a Marx… el Groucho, cuando afirma: -Tengo principios, pero si no le gustan tengo otros-
El nihilismo antropológico no le corta el apetito a la Dra Veneno. Parlotea sobre la meritocracia como hace su líder Macri omitiendo que cuando los hombres y mujeres del pueblo nacen, la economía, ya está ahí esperándolos, y generalmente está dirigida por opresores con el dinero apoderado con el uso de la violencia y los privilegios.
La Dra Veneno oculta la situación histórica donde el neoliberalismo en Argentina, con su injusticia y opresión, corrompió la educación, la salud y la economía, impidiendo a la inmensa mayoría de los hombres y mujeres, el acceso a la reflexión y el bienestar.
Usa a la sociedad como terreno natural para exteriorizar sus pulsiones (perversas) y esconder su responsabilidad (inmoral). Se siente cómoda cediendo a su deseo primitivo. Juntos: Clarín y el poder de jueces, la raspan cínicamente, poniéndola al abrigo de toda responsabilidad individual y política.
Su registro del paso del tiempo, al no lograr una candidatura por auto aclamación de la ultraderecha, la moja de rabia impotente, y cuando hace la denuncia contra las vacunas, es por desesperación de no poder prometer, mentir, ni inventar muecas conspirativas. Hay 50.000 muertos por Covid 19 y miles de personas abnegadas luchando para combatir la epidemia mientras ella juega con la muñeca Republiquita, en el set de televisión.
En sus tiempos de delirio malsano, para ser la única estrella de la política trata de mudarse de domicilio, cambiar de marketing o de partido como lo hace de ropa. Sigue siendo un “caso” interesante para verla como un efecto de lo que es capaz de instrumentar el poder real.
La Dra chapalea, cómoda, tremendista, en el tono denunciante de su ambición sin límite siempre muy cuidada por el “periodismo de guerra” y amañada por la “telemedicina ficcional” del Dr Nelson Castro.
Con el escenario de pandemia, pero sin una realidad-objeto-presente, inventa otra realidad con fragmentos alucinando catástrofes; fantasmagórica se auto postula como garantía del carácter referencial de los hechos que denuncia. La repetición mediática, le da la cuota de verosimilitud al desparpajo tragicomico que utiliza para llevar al extremo el aspecto teatral de la política. Muestra la corrupción ética y material de su propuesta.
La Dra Veneno, nuevamente con la posibilidad real de cuidar a la población en general, elije atacar y adjetivar fuerte contra las vacunas primero, después contra la Sputnik y la vacunación, tildando de criminal al gobierno. La Reina, desnuda, continua en su turbio regodeo otrora pseudo cristiano y ahora como forajida sadomasoquista atacando la convivencia democrática entre argentinos. Los equipos de salud que trabajan contra la pandemia repudian sus declaraciones y la denuncia del 22 diciembre 2021.
Por Ricardo Arias – Agrupacion Sudeste – Verano 2021
