Por Roxana Lopez*
Como cada 8 de marzo nos encontramos todas y todes en las calles para hacer oír nuestras voces. Pero este año en particular, el Día de la Mujer cobra aún más relevancia debido al reciente intento de magnicidio y proscripción que está atravesando nuestra Vicepresidenta y dos veces Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner.
Estos hechos nos alertan que la violencia contra las mujeres no se restringe a la esfera privada, sino también se manifiesta en el ámbito público y político. Por ello, es necesario seguir luchando y exigiendo desde cada uno de los lugares que habitamos la erradicación de todas las formas de violencia de género, porque de eso depende la construcción de una Democracia plena para todes.
Sabemos que la violencia no es aleatoria y que existen mecanismos que se encargan de reproducirla sistemáticamente sobre todas nosotras. Y por ese motivo, entendemos que nuestro deber como militantes del campo nacional y popular es defender a Cristina, porque además de ser mujer, en ella se sintetizan décadas de conquistas y luchas del movimiento feminista. En Cristina encontramos los avances que los gobiernos peronistas garantizaron y siguen garantizando para todas nosotras: el reconocimiento del derecho al voto de las mujeres; la creación del Ministerio de las Mujeres y Diversidades; la protección laboral, la promoción de la educación y la formación profesional de las mujeres; la protección de las madres y les niñes; el derecho al divorcio; la ley de protección integral contra la violencia de género; el programa de salud sexual y reproductiva; la inclusión de la perspectiva de género en políticas públicas; la ley de identidad de género; el matrimonio igualitario; el cupo femenino y la ley de interrupción voluntaria del embarazo, entre otras medidas.
Este 8M nos encuentra nuevamente en lucha y alertas, porque actualmente la democracia depende de los varones que digitan la justicia. Depende de aquellos varones que constantemente nos violentan para garantizar su impunidad. Porque los mismos varones que hoy quieren proscribir a Cristina son los que permiten que los progenitores irresponsables no cumplan con la cuota alimentaria, que violen en manada a nuestras pibas, que golpeen a nuestras hermanas, madres o amigas sin ningún tipo de consecuencia, o que nos maten, porque la impunidad está garantizada.
Esta justicia depende de los varones que se mensajean con políticos corruptos que aceptan regalos y viajes a cambio de entregar nuestros bienes naturales a los Lewis del mundo y poner en riesgo nuestro futuro. Depende de los mismos varones que permiten que las empresas de Magnetto manejen lo que consideramos servicios públicos esenciales y eligiendo las tarifas que desean, poniendo los intereses de un monopolio por encima de los bolsillos de toda una Nación. Depende de los varones que son elegidos a dedo por un ex presidente que nos endeudó por 100 años por 45mil millones de dólares.
Por eso salimos a las calles en este día, porque no solo queremos, sino que necesitamos y exigimos que nuestras vidas no dependan más de estos varones. Y porque sabemos que la única forma de que esto suceda es mediante la reforma judicial feminista y fundamentalmente del cese de la persecución judicial, política y mediática que encarna Cristina, pero que sufren todas nuestras compañeras por ser mujeres peronistas y no mascotas.
Este 8M todes en la calle porque sin Cristina, no hay democracia posible.
NADA SIN CRISTINA.
*Roxana Lopez – Diputada Provincial