A un año de la aprobación de la ordenanza que dio origen a la Policía Municipal y la Guardia Urbana, Escobar consolida un modelo de seguridad reconocido por su cercanía con los vecinos, su rápida respuesta y la incorporación de tecnología e innovación. El proyecto, impulsado por el intendente Ariel Sujarchuk y aprobado por unanimidad en el Concejo Deliberante el 1 de noviembre de 2024, marcó un punto de inflexión en las políticas locales de prevención y asistencia.
“La creación de la Policía Municipal no fue solo una medida de seguridad, sino un sistema entero que implicó más presencia, cercanía y respuestas concretas a una demanda de la sociedad. En un contexto donde muchos eligen retirarse del territorio, Escobar reafirma una forma de gobernar que escucha, se involucra y cuida”, expresó la presidenta del Honorable Concejo Deliberante, María Laura Guazzaroni.
Tras un proceso de selección y capacitación de cuatro meses, 840 efectivos comenzaron a patrullar las calles el 14 de marzo de este año. Ese día, Sujarchuk destacó: “La seguridad no se logra ni con mano dura, con mano blanda o con discursos vacíos, sino con decisiones políticas y una mano firme, inteligente y responsable contra la delincuencia”.
En su primer año de funcionamiento, la Policía Municipal realizó 40.385 actuaciones, con 784 aprehensiones (348 de ellas con causas judicializadas), 1.157 intervenciones por violencia de género, 97 allanamientos junto a fuerzas provinciales y federales, y 468 operativos vehiculares. Además, el promedio de respuesta ante llamados vecinales fue de solo seis minutos, un registro superior al de la mayoría de las fuerzas provinciales y nacionales.
Uno de los aspectos más innovadores fue la incorporación de armas no letales Byrna, cuyo uso permitió reducir situaciones de riesgo sin heridos. Casos como el de Ingeniero Maschwitz, donde un agente logró detener a un delincuente armado que intentaba ingresar a una vivienda, o el de Garín, con la aprehensión de dos sospechosos durante un control vehicular, ejemplifican el impacto positivo de esta política. La experiencia de Escobar ya fue replicada en otros municipios como Tres de Febrero y Vicente López.
La secretaria de Seguridad, Rocío Fernández, destacó: “En este tiempo avanzamos en la formación constante de nuestros agentes, en la incorporación de tecnología, en la creación de nuevas bases operativas y en el fortalecimiento del Centro de Monitoreo. Este primer año demuestra que cuando hay planificación, las ideas se convierten en políticas públicas que trascienden”.
Con una estructura moderna, un enfoque preventivo y un fuerte vínculo con la comunidad, el modelo de seguridad de Escobar se consolida como un ejemplo de gestión local que prioriza la cercanía, la eficiencia y el compromiso con la vida cotidiana de sus vecinos.









