En el marco de la reunión de presidentes de Conferencias Episcopales de todo el mundo para la Protección de Menores, presidida y requerida por el papa Francisco como un acto de profunda responsabilidad pastoral; desde el aula del Sínodo, monseñor Oscar Ojea, obispo de San Isidro y presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, compartió sus vivencias; destacando en primer lugar la seriedad con la que se preparó el encuentro, considerando la profundidad de cada una de las charlas y exposiciones.
Del mismo modo, monseñor Ojea enfatizó el espíritu fraterno en el momento de los grupos menores, y el de los grupos de trabajo. Subrayó el sentido de preocupación común y de responsabilidad de la totalidad de los Obispos, quienes manifestaron el valor de la escucha activa.
El presidente del Episcopado Argentino destacó que esta triste problemática es transversal a toda la Iglesia, se da en todas las culturas siendo no sólo un tema eclesial, sino un problema social muy complicado.
Monseñor Oscar Ojea expresó:
“La reunión para la Protección de Menores logró sensibilizar, colocando como primera prioridad estar del lado de las víctimas, estableciendo una distancia insoslayable entre la defensa del menor y cualquier otra situación que tenga que ver con el desenvolvimiento del proceso. Destacando el desechar toda forma de encubrimiento habida cuenta de que perjudicaría enormemente a las víctimas; por lo cual debe ponerse de relieve la necesidad que tienen de ser escuchadas principalmente por los pastores de la Iglesia.”
“Es fundamental acentuar la propuesta emergida por parte de los círculos menores; desde donde se promueve la formación de comisiones interdisciplinarias de laicos y laicas, integradas por profesionales psiquiatras, psicólogos, abogados, trabajadores sociales y otras profesiones pertinentes que posibiliten el escuchar y acompañar a las víctimas; lo que de alguna manera contribuiría al trabajo de los obispos. Este es un aspecto a desarrollar de manera ineludible”.
“Debemos recalcar la actitud del Santo Padre; quien estuvo continuamente en la totalidad de las exposiciones, preguntas y devoluciones de trabajo expuestos por los círculos menores. De igual forma, participó reiteradas oportunidades con intervenciones personales y pastorales”.
“Finalmente fue anunciada, por parte de la Sagrada Congregación para la Doctrina de la Fe, la confección de un vademécum para obispos e igualmente la formulación de disposiciones particularmente para el Estado Vaticano sobre el abordaje de la Protección de menores”.
Damos gracias a Dios y a la Santísima Virgen María por este encuentro de profunda reflexión y responsabilidad pastoral.