El 24 de marzo de 1976 es una huella histórica de nuestra nación. Nuestras acciones determinan si las políticas de miseria planificada implementadas por Martínez de Hoz desde el 24 de marzo sirven como un aprendizaje colectivo a incorporar como pueblo, o un karma que estamos destinados a repetir cíclicamente.
El sufrimiento de distintos tipos y niveles a escala masiva durante período de la dictadura cívico militar está marcado a fuego por las vidas que dejaron nuestros compañeros estudiantes, trabajadores, militantes sociales y barriales que simplemente querían una sociedad más justa, con chances de progreso para todos.
La discusión por el número de los 30 mil compañeros y compañeras es una deliberada búsqueda de tirar para atrás la discusión ya saldada hace décadas sobre los desaparecidos. La embajada admite 22 mil desaparecidos recién en el año 1978, según cables desclasificados por la embajada norteamericana según, publican los diarios Clarín y La Nación.*
El verdadero objetivo de la sanguinaria dictadura que no permitía que nuestro pueblo reclame sus derechos sin ser perseguidos, encarcelados, asesinados y/o torturados, fue desarmar espiritual e intelectualmente el legado de empoderamiento popular Justicialista que Juan Domingo Perón tan elocuentemente describe en su obra maestra, La Comunidad Organizada.
“La justicia no es un término insinuador de violencia, sino una persuasión general; y existe entonces un régimen de alegría, porque don de lo democrático puede robustecerse en la comprensión universal de la libertad y el bien general, es donde, con precisión, puede el individuo realizarse a sí mismo, hallar de un modo pleno su euforia espiritual y la justificación de su existencia.”
La justicia social no se impone violentamente sobre ningún actor social que busque la cooperación equitativa de los sectores socioeconómicos en pos de una superación de las partes que lleve a oportunidades de ascenso socioeconómico para todos. Nada más pacífico, nada más resistido por la eterna minoría de nuestro joven país que busca sostener privilegios oligárquicos feudales y anacrónicos que imposibilitan un progreso económico sostenido.
Por Lucas Gianella – Concejal Frente de Todos Tigre
*https://www.lanacion.com.ar/politica/el-ejercito-admitio-22000-crimenes-nid791532
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https://www.clarin.com/ediciones-anteriores/informe-eeuu-dice-22000-desaparecidos_0_BkJz8qrJ0Kx.html
